domingo, 12 de junio de 2016

En el lecho


Lydia Lunch, 1976. Foto: David Baumbach


LETEO*
Lydia Lunch

Ven a mis brazos, cosa cruel y sombría
bestia indolente, ven a mis brazos otra vez
Porque quiero hundir los dedos en tu melena
Y permanecer largo tiempo sin recordar
Enterrarme en ti
Respirar tu perfume salvaje, sin remordimiento
Durante una hora más
Respirar de nuevo, como una flor en ruinas
Fragancia del amor que has manchado
Me abandono al sueño
Siento que en ese sueño cual muerte
Me despierto como era antes
Y en la lujuria sin vergüenza
Me resguardo con tu cuerpo, brillante y oscuro

Para ahogar mi dolor no hay abismo,
Sin embargo profundo, se compara con tu cama


LETHE
Lydia Lunch

Come to my arms, cruel and sullen thing
Indolent beast, come to my arms again
For I would plunge my fingers in your mane
And be a long time unremembering
Bury myself in you,
Breathe your wild perfume, remorselessly
For one more hour
Breathe again, as of a ruined flower
Fragrance of love you have defiled
I long to sleep,
I think that from a slumber like death,
I would awake as I once was
And lavish without shame
Caress upon your body, glowing and dark

to drown my sorrow there is no abyss,
however deep, that compares with your bed


Lydia Lunch, Matrikamantra (1997)


*En la mitología griega el Leteo era el río del olvido y, aunque no comparte etimología, de alguna forma curiosa el contexto de la letra parece emparentarla además, involuntariamente, con la palabra latina lectum (lecho) que a su vez proviene del término indo-europeo legh (estar echado, sedimentar) emparentada con el céltico lega (légamo, ciénaga) lo cual aún ahonda más, de nuevo involuntariamente, en el tema de la canción. La base rítmica de la canción es el 'Requiem Pour Un Con' de Serge Gainsbourg, aunque extrañamente recuerda al 'Justify My Love' que, según los créditos de esa canción, compuso Lenny Kravitz para Madonna ('The Immaculate Collection', 1990).